CAS
Los miembros de Badalona Indignada hemos pasado los últimos seis días en el Hospital de Can Ruti para hacer patente nuestro desacuerdo con los recortes de la Sanidad en nuestra ciudad y el conjunto del país.
A lo largo de nuestra estancia en Can Ruti, hemos conocido de primera mano la gravedad de la situación que han generado los recortes. Consideramos que tenemos la obligación de compartir esta información con el resto de la ciudadanía.
Durante los días que hemos pasado acampados en Can Ruti, hemos hablado con trabajadores y usuarios del hospital que nos han revelado datos alarmantes que podéis leer en el comunicado adjunto.
Después de casi una semana acampados en Can Ruti, las conclusiones de Badalona Indignada son las siguientes:
A lo largo de nuestra estancia en Can Ruti, hemos conocido de primera mano la gravedad de la situación que han generado los recortes. Consideramos que tenemos la obligación de compartir esta información con el resto de la ciudadanía.
Durante los días que hemos pasado acampados en Can Ruti, hemos hablado con trabajadores y usuarios del hospital que nos han revelado datos alarmantes que podéis leer en el comunicado adjunto.
Después de casi una semana acampados en Can Ruti, las conclusiones de Badalona Indignada son las siguientes:
- Los recortes en Sanidad afectan la calidad de la asistencia (aumento de las listas de espera, eliminación de camas, reducción de pruebas complementarias, disminución de intervenciones quirúrgicas, etc.).
- A raíz de los recortes, el conjunto del personal sanitario se enfrenta a unas exigencias laborales (cuantitativas, emocionales, etc.) Que comportan un riesgo para su salud y la de los pacientes.
- La gran mayoría de pacientes no presenta reclamaciones al centro. La explicación es, por un lado, la convicción de que estas reclamaciones son inútiles, por otra, la ciudadanía tiene miedo de perjudicar a los trabajadores.
- Hay razones para sospechar que se pretende privatizar partes del hospital
Comunicado cierre #acampadacanruti
Los miembros de Badalona Indignada hemos pasado los últimos seis días en el Hospital de Can Ruti para hacer patente nuestro desacuerdo con los recortes de la Sanidad en nuestra ciudad y el conjunto del país.
A lo largo de nuestra estancia en Can Ruti, hemos conocido de primera mano la gravedad de la situación que han generado los recortes. Consideramos que tenemos la obligación de compartir esta información con el resto de la ciudadanía.
Durante los días que hemos pasado acampados en Can Ruti, hemos hablado con trabajadores y usuarios del hospital que nos han revelado datos alarmantes:
· Hasta ahora, los pacientes crónicos tenían visitas programadas cada 2-3 meses. En estas visitas, se les proporcionaban las recetas médicas necesarias para acceder a los fármacos que necesitan ahora y durante toda la vida.
Desde el mes de abril de 2011, con el propósito de ahorrar dinero al departamento de farmacia del centro, estos enfermos deben acudir a Can Ruti cada mes a recoger las prescripciones, independientemente de su lugar de residencia o estado de salud.
Ahora se está empezando a derivar a los enfermos a los centros de sus lugares de procedencia, aunque dichos centros no dispongan de la especialidad en cuestión.
· El personal del centro nos ha comunicado que hay plantas de Can Ruti cerradas totalmente o parcialmente. Por ejemplo:
-La décima planta: un pasillo permanece cerrado.
-La quinta planta
-La cuarta planta (maternidad): solo funciona la mitad.
-La tercera planta: el servicio de traumatología ha permanecido cerrado por reformas desde mayo de 2011 hasta hace una semana.
Específicamente, el personal de Can Ruti nos ha transmitido que, durante los días que Badalona Indignada ha acampado en Can Ruti:
-El servicio de radiodiagnóstico ha permanecido cerrado.
-La UCI cardíaca ha permanecido cerrada toda la semana.
-En la primera planta, de los 7 quirófanos disponibles solo han funcionado 3.
-El laboratorio ha permanecido abierto, pero solo para urgencias.
-El servicio de consultas externas ha estado funcionando al 40 %. Según nos dijeron los portavoces del hospital, el lunes 5 y el miércoles 7 de diciembre por la mañana Can Ruti esperaba una gran afluencia de pacientes, que podrían sentirse muy molestos por nuestra actividad. Los trabajadores del centro, en cambio, nos aseguraron que no sería así. Efectivamente, la afluencia de pacientes en los días mencionados no fue, ni mucho menos, masiva.
· El personal del centro nos ha informado de que hay obras en curso en plantas y quirófanos. Sin embargo, una vez concluidas estas obras, los espacios se mantienen cerrados.
Badalona Indignada ha podido constatar, desde el vestíbulo principal, que el martes 6 y el jueves 8 de diciembre, días festivos, había obras justo en la planta superior.
· Los trabajadores y trabajadoras de Can Ruti nos han transmitido sus sospechas de que se está negociando la venta de instalaciones del hospital a mutuas o empresas privadas. Sería el caso de la tercera planta (traumatología), neurología, coronaria, UCI cardíaca y parte de los quirófanos.
Según nos han dicho, estas operaciones se llevan a cabo poco a poco y sin informar al personal. La falta de transparencia es evidente.
· El personal del centro nos ha hecho saber que, a pesar de los recortes y cierres de plantas y servicios, Can Ruti ha adquirido una máquina dispensadora de fármacos de coste muy elevado.
· Los trabajadores y trabajadoras nos han informado de que el centro ha llegado a concentrar tres especialidades en un mismo espacio del hospital. Las consecuencias son, entre otras:
-Riesgos para la salud de los pacientes. Por ejemplo, han llegado a coincidir en un mismo lugar maternidad y traumatología.
-Un movimiento constante de médicos entre las plantas del centro, lo cual dificulta el seguimiento del paciente.
· El personal de Can Ruti nos ha revelado algún caso de carencia de bombas de morfina suficientes para todos los pacientes que las necesitan, con el sufrimiento consiguiente de estas personas.
· Los pacientes y el personal del centro nos han confirmado el colapso de las urgencias de Can Ruti. Durante el fin de semana anterior a nuestra acampada, había un total de 57 camas en el pasillo. Esta circunstancia obligó al hospital a abrir parte de una planta para trasladar a ella a 37 enfermos. De hecho, según nos han comunicado, es habitual que el centro tenga camas a los pasillos, pese a disponer de plantas vacías.
· Según el personal del centro, un total de 77 camas han dejado de estar disponibles para los pacientes. De hecho, es habitual que se traslade a los enfermos a distintas ubicaciones del centro, hasta que finalmente queda una cama libre en la planta de la especialidad correspondiente.
· La plantilla del centro subraya que la situación actual en Can Ruti es extremadamente tensa. Según nos informan, aunque hasta ahora se ha podido hacer frente a las circunstancias actuales, estas no se pueden prolongar demasiado, pues las consecuencias podrían ser todavía más graves.
· Pacientes y familiares nos han indicado que en la UCI del centro hay un número insuficiente de profesionales por atender a los enfermos.
· Pacientes y familiares nos han hecho saber que en Can Ruti se emiten diagnósticos erróneos, dado que no se practican todas las pruebas necesarias a los enfermos. Como resultado, el paciente debe volver al centro unos días más tarde, con su estado de salud agravado. En algunos casos, estamos hablando de ciudadanos que sufren enfermedades graves, como, por ejemplo, el caso de un joven con un tumor en el colon.
· Pacientes y familiares nos han manifestado que algunos enfermos han tenido que esperar entre 3 y 4 días en el servicio de urgencias antes de que los subieran a planta. Además, los hay que han recibido instrucciones de volver a casa y, en caso de que al día siguiente se sintieran mal, acudir nuevamente a Can Ruti.
· Pacientes y familiares nos han explicado que los enfermos han llegado a esperar hasta 7 y 8 horas para que una ambulancia los trasladara a su domicilio.
· Pacientes y familiares nos han puesto al corriente de los retrasos en los tratamientos programados, como en el caso de la quimioterapia o las intervenciones quirúrgicas.
A lo largo de la semana, Badalona Indignada ha recogido 2140 firmas en contra de los recortes. Nuestra intención es realizar una acción con estas firmas. Esta acción, que se desarrollará junto con los usuarios y el personal de Can Ruti, las entidades y las asociaciones, se anunciará próximamente.
Durante nuestra estancia en Can Ruti, ha habido una buena comunicación con las personas interlocutoras del hospital, que no nos han puesto ningún impedimento a la hora de acampar y hacer las actividades que teníamos programadas en el vestíbulo del centro.
Queremos expresar nuestro agradecimiento a todas las personas (pacientes, familiares, trabajadores y trabajadoras) que nos han apoyado y han participado a las charlas, asambleas, talleres, etc.
Asimismo, damos las gracias a todos quienes nos han proporcionado espontáneamente la información que recogemos en este comunicado, una información imposible de obtener por los canales oficiales, a raíz de la opacidad informativa.
Finalmente, queremos agradecer a los medios de comunicación el interés mostrado por esta acción.
Tras casi una semana acampados en Can Ruti, las conclusiones de Badalona Indignada son las siguientes:
· Los recortes en Sanidad afectan a la calidad de la asistencia (aumento de las listas de espera, eliminación de camas, reducción de pruebas complementarias, disminución de intervenciones quirúrgicas, etc.).
· A raíz de los recortes, el conjunto del personal sanitario se enfrenta a unas exigencias laborales (cuantitativas, emocionales, etc.) que conllevan un riesgo para su salud y la de los pacientes.
· La gran mayoría de pacientes no presenta reclamaciones al centro. La explicación es, por un lado, la convicción de que estas reclamaciones son inútiles; por otro, la ciudadanía teme perjudicar a los trabajadores.
Hay razones para sospechar que se pretende privatizar partes del hospital
Els membres de Badalona Indignada hem passat els darrers sis dies a l’Hospital de Can Ruti per fer palès el nostre desacord amb les retallades de la Sanitat a la nostra ciutat i al conjunt del país.
Al llarg de la nostra estada a Can Ruti, hem conegut de primera mà la gravetat de la situació que han generat les retallades. Considerem que tenim l’obligació de compartir aquesta informació amb la resta de la ciutadania.
Al llarg de la nostra estada a Can Ruti, hem conegut de primera mà la gravetat de la situació que han generat les retallades. Considerem que tenim l’obligació de compartir aquesta informació amb la resta de la ciutadania.
Durant els dies que hem passat acampats a Can Ruti, hem parlat amb treballadors i usuaris de l’hospital que ens han revelat dades alarmants que podeu llegir al comunicat adjunt:
Després de gairebé una setmana acampats a Can Ruti, les conclusions de Badalona Indignada són les següents:
- Les retallades a Sanitat afecten la qualitat de l’assistència (augment de les llistes d’espera, eliminació de llits, reducció de proves complementàries, disminució d’intervencions quirúrgiques, etc.).
- Arran de les retallades, el conjunt del personal sanitari s’enfronta a unes exigències laborals (quantitatives, emocionals, etc.) que comporten un risc per a la seva salut i la dels pacients.
- La gran majoria de pacients no presenta reclamacions al centre. L’explicació és, d’una banda, la convicció que aquestes reclamacions són inútils; de l’altra, la ciutadania té por de perjudicar els treballadors.
- Hi ha raons per sospitar que es pretén privatitzar parts de l’hospital.
Comunicat cloenda #acampadacanruti
Els membres de Badalona Indignada hem passat els darrers sis dies a l’Hospital de Can Ruti per fer palès el nostre desacord amb les retallades de la Sanitat a la nostra ciutat i al conjunt del país.
Al llarg de la nostra estada a Can Ruti, hem conegut de primera mà la gravetat de la situació que han generat les retallades. Considerem que tenim l’obligació de compartir aquesta informació amb la resta de la ciutadania.
Durant els dies que hem passat acampats a Can Ruti, hem parlat amb treballadors i usuaris de l’hospital que ens han revelat dades alarmants:
· Fins ara, els pacients crònics tenien visites programades cada 2-3 mesos. En aquestes visites, se’ls proporcionaven les receptes mèdiques necessàries per accedir als fàrmacs que els calen ara i durant tota la vida.
Des del mes d’abril de 2011, amb l’objectiu d’estalviar diners al departament de farmàcia del centre, aquests malalts han d’acudir a Can Ruti cada mes a recollir-hi les prescripcions, independentment del seu lloc de residència o estat de salut.
Ara s’està començant a derivar els malalts als centres dels seus llocs de procedència, encara que aquests centres no disposin de l’especialitat en qüestió.
· El personal del centre ens ha comunicat que hi ha plantes de Can Ruti tancades totalment o parcialment. En són exemples:
- La desena planta: un passadís hi resta tancat.
- La cinquena planta
- La quarta planta (maternitat): només en funciona la meitat.
- La tercera planta: el servei de traumatologia ha estat tancat per reformes des del maig de 2011 fins fa una setmana.
Específicament, el personal de Can Ruti ens ha transmès que, durant els dies que Badalona Indignada ha acampat a Can Ruti:
- El servei de radiodiagnòstic ha estat tancat.
- La UCI cardíaca ha estat tancada tota la setmana.
- A la primera planta, dels 7 quiròfans disponibles només n’han funcionat 3.
- El laboratori ha estat obert, però només per a urgències.
- El servei de consultes externes ha estat funcionant al 40%. Segons ens van informar els portaveus de l’hospital, dilluns 5 i dimecres 7 de desembre al matí Can Ruti hi esperava una gran afluència de pacients, que podrien sentir-se molt molests per la nostra activitat. Els treballadors del centre, en canvi, ens van assegurar que no seria així. Efectivament, l’afluència de pacients en els dies esmentats no va ser, ni de lluny, massiva.
· El personal del centre ens ha informat que hi ha obres en curs a plantes i quiròfans. Ara bé, un cop acabades aquestes obres, els espais es mantenen tancats.
Badalona Indignada ha pogut constatar, des del vestíbul principal, que dimarts 6 i dijous 8 de desembre, dies festius, hi havia obres just a la planta superior.
· Els treballadors i treballadores de Can Ruti ens han transmès les seves sospites que s’està negociant la venda d’instal·lacions de l’hospital a mútues o empreses privades. Seria el cas de la tercera planta (traumatologia), neurologia, coronària, UCI cardíaca i part dels quiròfans.
Segons ens han dit, aquestes operacions es van fent a poc a poc i sense informar-ne el personal. La manca de transparència és evident.
· El personal del centre ens ha fet saber que, tot i les retallades i tancaments de plantes i serveis, Can Ruti ha adquirit una màquina dispensadora de fàrmacs de cost molt elevat.
· Els treballadors i treballadores ens han informat que el centre ha arribat a concentrar fins a tres especialitats en un mateix espai de l’hospital. Les conseqüències són, entre d’altres:
- Riscs per a la salut dels pacients. Per exemple, han arribat a coincidir en un mateix indret maternitat i traumatologia.
- Un moviment constant de metges entre les plantes del centre, la qual cosa dificulta el seguiment del pacient.
· El personal de Can Ruti ens ha revelat algun cas de manca de bombes de morfina suficients per a tots els pacients que les necessiten, amb el sofriment consegüent d’aquestes persones.
· Els pacients i el personal del centre ens han confirmat el col·lapse de les urgències de Can Ruti. Durant el cap de setmana anterior a la nostra acampada, hi havia un total de 57 llits al passadís. Aquesta circumstància va obligar l’hospital a obrir part d’una planta per traslladar-hi 37 malalts. De fet, segons ens han comunicat, és habitual que el centre tingui llits als passadissos, malgrat disposar de plantes buides.
· Segons el personal del centre, un total de 77 llits han deixat d’estar disponibles per als pacients. De fet, és habitual que es traslladi els malalts a diferents ubicacions del centre, fins que finalment hi ha un llit lliure a la planta de l’especialitat corresponent.
· La plantilla del centre subratlla que la situació actual a Can Ruti és extremadament tensa. Segons ens informen, tot i que fins ara s’hi ha fet front, les circumstàncies actuals no es poden prolongar gaire, perquè les conseqüències podrien ser encara més greus.
· Pacients i familiars ens han indicat que a la UCI del centre hi ha un nombre insuficient de professionals per atendre els malalts.
· Pacients i familiars ens han fet saber que a Can Ruti s’emeten diagnòstics erronis, atès que no s’hi practiquen totes les proves necessàries als malalts. Com a resultat, el pacient ha de tornar al centre uns dies més tard, amb el seu estat de salut agreujat. En alguns casos, estem parlant de ciutadans que pateixen malalties greus, com ara el cas d’un jove amb un tumor al còlon.
· Pacients i familiars ens han manifestat que alguns malalts han hagut d’esperar entre 3 i 4 dies al servei d’urgències abans que els pugessin a planta. A més a més, n’hi ha que han rebut instruccions de tornar a casa i, en cas que l’endemà es trobessin malament, acudir novament a Can Ruti.
· Pacients i familiars ens han explicat que els malalts han arribat a esperar fins a 7 i 8 hores perquè una ambulància els traslladés al seu domicili.
· Pacients i familiars ens han posat al corrent dels retards en els tractaments programats, com en el cas de la quimioteràpia o les intervencions quirúrgiques.
Al llarg de la setmana, Badalona Indignada ha recollit 2140 signatures en contra de les retallades. La nostra intenció es realitzar una acció amb aquestes signatures. Aquesta acció, que es desenvoluparà juntament amb els usuaris i el personal de Can Ruti, les entitats i les associacions, s’anunciarà properament.
Durant la nostra estada a Can Ruti, hi ha hagut una bona comunicació amb les persones interlocutores de l’hospital, que no ens han posat cap impediment a l’hora d’acampar i fer les activitats que teníem programades al vestíbul del centre.
Volem expressar el nostre agraïment a totes les persones (pacients, familiars, treballadors i treballadores) que ens han donat suport i han participat a les xerrades, assemblees, tallers, etc.
Així mateix, donem les gràcies a tots els qui ens han proporcionat espontàniament la informació que recollim en aquest comunicat, una informació impossible d’obtenir pels canals oficials, arran de l’opacitat informativa.
Finalment, volem agrair als mitjans de comunicació l’interès mostrat per aquesta acció.
Després de gairebé una setmana acampats a Can Ruti, les conclusions de Badalona Indignada són les següents:
· Les retallades a Sanitat afecten la qualitat de l’assistència (augment de les llistes d’espera, eliminació de llits, reducció de proves complementàries, disminució d’intervencions quirúrgiques, etc.).
· Arran de les retallades, el conjunt del personal sanitari s’enfronta a unes exigències laborals (quantitatives, emocionals, etc.) que comporten un risc per a la seva salut i la dels pacients.
· La gran majoria de pacients no presenta reclamacions al centre. L’explicació és, d’una banda, la convicció que aquestes reclamacions són inútils; de l’altra, la ciutadania té por de perjudicar els treballadors.
Hi ha raons per sospitar que es pretén privatitzar parts de l’hospital.
